octubre 26, 2010

Tan de sol.


Como el Venus,
que de noche tirita en el infinito.
Como el reflejo intermitente
de cada parpadeo.

Así. Te respiro.

En la sombra fragil de los arboles,
en el brote tremulo de esta piel fria.

Ahí. Te siento.

Ni el azul mismo en forma de mujer,
me seduce tanto.

Es que eres tan de viento, tan de sol.


C. Lovera.

No hay comentarios: