abril 02, 2011

Ya te respondo, con mis maletas en la puerta.

Porque no hay nada que me sostenga en esta ciudad. Porque mis motivos son tontos. Espera, no son tontos; son inexistentes. Es decir, no son. Mas si entramos en cuestiones de el ser, el no ser, el existir y el quedarse pendejeando, solo le estoy dando vueltas al asunto, lo que ocasionara que crezca mas mi duda endemoniada sobre que hacer (espere post donde explique mi problema sobre el "qué hacer"), y después vendrá uno de esos ataques de rabia-llanto (cosa que nadie quiere, verdad?).

Tras escarbar en mi caos.

Quiero irme de aquí, cambiar de aire, quiero iniciar de cero, sin nadie, quiero borrarme y volverme a pintar. Quiero un pretexto para tirar todo sin preocuparme en si lo usaré después, quiero ser desconocida, sentirme lista para correr. Quiero encontrarme. Necesito hacerlo, porque me voy a romper si no veo por donde camino. 

Ay, si supiera como salvar una vida. 

marzo 14, 2011

Marzo. Pi.

Que fui yo.
¿Fui un pez mas en la pecera que esta arrumbada en tu habitación?
No creo.
Fui mas.
Según yo.
¿Que fui, que fui...?
Fui la Loca con reglas diferentes.

-Como suena...¿lo escuchas?
Diferente.-

También, 
en los ratos de ternura en tonos pastel
me convertí en la nena
a la que le brillaban los ojos al miraros, 
la que crecía en instantes
cuando se apagaba la luz, 
la que se hacia mujer al besar los rincones de tu cuello.
Incluso,
me hice vieja
para padecer un falso Alzheimer, 
todo por olvidarme un rato
de lo frío que se sentía el cristal.

-Tu cristal.-

Yo fui tu secreto mejor guardado,
tanto
que nunca me volviste a reconocer.


A la chingada. Que hoy, solo vivo para mí.


febrero 24, 2011

Un mensaje resentido.

Me senté en el muro que divide la calle a ver al día morirse. Que sádica. Ya perdí la cuenta de los días que llevo haciendo lo mismo. Soy infeliz. No me siento, me cae, hoy confirme mi entendimiento entre el "sentirse" y el "ser". Se me olvidó donde instalé el botón de Reset. Pero estoy segura que anda por donde perdí la paz. Mi otra voz, creo que se ha ido de viaje. Ojala me hubiera llevado también. Para ya no tener regresos sin partir.

Vivo bajo el pellejo de un maniquí. Saliendo de vez en vez, con mis pasos minimizados. Incomoda. En crisis cuando apuesto $10 a los zapatos que dicen -Suicida- en la suela.

¿Qué? ¡¿Queeeé?

Sí, soy la idiota que se perdió, a la que los audífonos asquean cuando la letra de las canciones se me hace superficial, vacía, estúpida, irritante...o cuando me da envidia lo que expresan, quiero romper el espejo mientras me muerdo los labios al imaginarme sus sonrisas y borrar al rostro que se refleja en el*, porque tengo al demonio en casa. Para colmo en la TV, descontinuaron las pastillas para no soñar. 




*Ya no conozco a esa chica, ni a sus manos, ni sus ojos, menos su expresión; sé que una vez la ví...¿donde? No me acuerdo.

febrero 21, 2011

Cuando una ya no sabe ni que chingados hacer porque choco el coche de su mami.

Ya me cargò.
Tzzz...la crisis me dio en toditita la mauser (casi ni parece que soy del DF).
Tengo mi cerebro SE-CO.
Mis ideas estan en la licuadora (las pocas y amorfas que me quedan).
Tanto que he dejado el Walk por ahi...tirado.
Ha de ser la abstinencia.
O es que quizas ya...pus, como se llama...se me fue el encanto?
Neh, no creo.
Estoy falta de inspiracion.
Ya deberian vender un Valium chingon.






Luego nos vemos, cuando se me prenda el foco y pueda escribir algo decente.

enero 14, 2011

¿Dónde se compra la objetividad?

Tengo una maldición.

No una de esas que matan maridos nomás firme el acta yo. Ni de esas que te sacan barros. Ya quisiera una maldición chingona, pa divertirse, pa sentarme en un puente con la amenaza de ir a lamer el asfalto. Ya divago. La objetividad se me escurre de las manos y no tengo p*ta idea de donde compro mas. Whatever. Me salgo del tema verdá? Ya no sé, no sé. Entre platicas cuchas con mi alter ego me doy cuenta de que quiero llorar, pero una afección anatómica me lo impide, rió y no me sabe.

Ay maldición, será que apenas convoco el nombre de una mujer en mis adentros; empiezo a perseguir a la niña pequeña que quiere seguir jugando, corro a perseguirla con cuchillo en mano...decidida a quitar esos hierbajos malignos, más el problema es parte del encanto, corto el moho...y me llevo una parte sana. Me amputo a mi misma. A la poesía, a la música, al arte perdido de andar.

Maldición. La maldición. Mi maldición.